sábado, 16 de febrero de 2013

DEL TORO DE MÉLIDA AL TORO DE OSBORNE


 

 

 



 
 

Pasaron casi 80 años desde que Enrique Mélida Alinari pintara un toro estático en su cuadro ¡Se aguó la fiesta! hasta que éste pudiera contemplarse sobre las colinas desde las carreteras de España. En esta labor participaron, de forma consciente o no, varios artistas. Muchos de ellos no han visto todavía reconocida su labor. Una de las intenciones de este artículo es corregir este olvido. Veamos quiénes fueron.

 

 

 

Enrique Mélida Alinari

 
        Autor del cuadro ¡Se aguó la fiesta! En otros artículos de este blog se puede encontrar información del autor y su obra.
 

 

Enrique Mélida Alinari (1838-1892)














Alfonso Romero Mesa y Enrique Guijo Navarro

 

 


Alfonso Romero Mesa (1882-1940)

 
 


Enrique Guijo Navarro (1881-1944)

        En 1907 abrió sus puertas en la calle Echegaray de Madrid la taberna de ambiente taurino Los Gabrieles. Gabrieles en el argot popular significa garbanzos, un alimento básico en la dieta de los madrileños de principios del siglo XX. Por los salones de Los Gabrieles, y hasta su cierre en 2004, se dejaron ver personajes tan famosos como Pastora Imperio, Julio Romero de Torres, Zuloaga, Sánchez Mejías, Antonio Chacón, Manolo Caracol, Belmonte, Baroja, Valle Inclán, Ava Gardner. Incluso se cuenta que a sus fiestas flamencas asistieron Primo de Rivera y el rey Alfonso XIII.

Las paredes de Los Gabrieles están adornadas con murales cerámicos publicitarios obra de los artistas sevillanos Alfonso Romero y Enrique Guijo.
 

 

 
 
 
Los Gabrieles. Madrid


 

Anuncio de las bodegas Pedro Domecq de Jerez. Los Gabrieles

 
            Con sus cerca de 300 m2 de paneles de azulejos cerámicos, la mayoría de 15 x 15 cm, Los Gabrieles ha sido denominada la "Capilla Sixtina de la azulejería madrileña" y la "Catedral de la cerámica andaluza dedicada al vino de Jerez". Bodegas como Domecq, Garvey, Sánchez Romate, Carrasco y Rafael Cruz Conde encargaron anuncios para que adornaran sus paredes. Muchos de estos paneles reproducían cuadros de Goya, Velázquez y Enrique Mélida.

 

Anuncio de las bodegas Sánchez Romate de Jerez reproduciendo un cuadro de Velázquez. Los Gabrieles

 


Anuncios de las bodegas Rafael Cruz Conde y Carrasco de Jerez. Los Gabrieles
 

           Entre los paneles cerámicos pintados por Alfonso Romero y Enrique Guijo destaca el encargado por las bodegas Orbaneja de Jerez para su Amontillado Dávila, que reproducía el cuadro ¡Se aguó la fiesta! de Enrique Mélida.  Para algunos autores esta obra fue una fuente de inspiración para la creación de la imagen publicitaria del Toro de Osborne.

"En la madrileña taberna Los Gabrieles, cerca de la plaza de Santa Ana, podemos ver una copia de ¡Se aguó la fiesta! en azulejos, de gran belleza. Mirando este cuadro de Mélida, nos viene a la cabeza la imagen publicitaria del toro de Osborne, lo que hace pensar que, la silueta recortada en el horizonte de éste, podría haberse inspirado en el cuadro de Mélida." Victoria Mélida Ardura. Dossier: Los hermanos Mélida Alinari. Madrid Histórico Editorial SL. Nº 43. Enero/Febrero 2013. Páginas 33-47.
  

 

Anuncio de las bodegas Orbaneja de Jerez, obra de Alfonso Romero y Enrique Guijo, reproduciendo el cuadro ¡Se aguó la fiesta! de Enrique Mélida. Los Gabrieles




Anuncio de las bodegas Orbaneja de Jerez, obra de Alfonso Romero y Enrique Guijo, reproduciendo el cuadro ¡Se aguó la fiesta! de Enrique Mélida. Los Gabrieles














Carlos Ruano Llopis

 


Carlos Ruano Llopis (1878-1950)
 

       En 1932 la familia Domecq compró la prestigiosa ganadería brava de Veragua. En aquella época la cultura de los vinos de Jerez estaba muy ligada al mundo taurino y las bodegas Domecq encargaron a Carlos Ruano un cartel que identificara su marca con el toro bravo.

      Carlos Ruano ya era conocido en Jerez por ser el autor de los carteles de la Feria y Fiestas de la Primavera de 1925 y 1928.

    Observo que hay una estrecha relación entre los diseñadores de los carteles de este tipo de fiestas y los publicistas de las bodegas andaluzas.


 
Cartel de la Feria y Fiestas de Primavera de 1925. Carlos Ruano

 
 
Cartel de la Feria y Fiestas de Primavera de 1928. Carlos Ruano
 
         El cartel que Carlos Ruano diseñó para las bodegas Domecq representaba a un maletilla que huye de un toro bravo al que pretendía torear.

 


Azulejos del restaurante El gallo azul. Jerez. Carlos Ruano


        Esta imagen fue utilizada en varias ocasiones por las bodegas Domecq para sus campañas publicitarias hasta los años 70.



 

 

 
 
 

Versión de los años 60 del cartel del brandy Fundador de las bodegas Domecq en la que el maletilla fue sustituido por un joven con pantalones vaqueros, chaqueta de cuero negra y botas camperas














Rafael Raga Montesinos
  

 

Rafael Raga Montesinos (1910-1985)
 

            Siguiendo la tradición de las bodegas jerezanas, en 1950 las bodegas Osborne encargaron unos carteles publicitarios a Rafael Raga Montesinos y a los miembros de los estudios gráficos Mamelón de Jerez. Rafael Raga era conocido en Jerez por haber sido el ganador, en 1949 y 1953, de los concursos de carteles de las fiestas de la vendimia jerezana. Siguiendo la costumbre de su época, se eligió el toro en movimiento como imagen del cartel. Rafael Raga diseñó, entre otros, los carteles de Amontillado Coquinero, Fino Quinta y el brandy Veterano.

         Rafael Raga ha sido un referente en la historia del cartel publicitario español, siendo también autor de numerosos carteles de la productora de cine CIFESA.

 
 
Cartel de la Fiesta de la Vendimia de Jerez de 1949. Rafael Raga



Cartel de la Fiesta de la Vendimia de Jerez de 1953. Rafael Raga


 

Veterano. Osborne. Creación de Rafael Raga
  


Fino Quinta. Osborne. Obra de Rafael Raga
 

 

Amontillado Coquinero. Osborne. Rafael Raga

 

 

 

 

 

 

 

Manuel Prieto Benítez

 

 

Manuel Prieto Benítez (1912-1991)

  
          En 1956, seis años después que Rafael Raga creara el primer Toro de Osborne, las bodegas Osborne confiaron la publicidad del brandy Veterano a la empresa madrileña Azor. El diseñador gráfico de Azor era Manuel Prieto Benítez que pocos años antes había realizado el cartel de la Feria de Primavera del Puerto de Santa María. Como ocurriera con Carlos Ruano y Rafael Raga en Jerez, Manuel Prieto fue el elegido para crear la imagen publicitaria de Osborne.

 


Cartel de la Feria de Primavera del Puerto de Santa María de 1953. Manuel Prieto
 
         Hacía 25 años que Manuel Prieto residía en Madrid, y como andaluz aficionado a los toros conocía los ambientes taurinos de la ciudad. No debía serle desconocida la taberna Los Gabrieles con sus famosos paneles cerámicos, especialmente el de ¡Se aguó la fiesta!, obra muy conocida y reproducida en abanicos, postales, jarrones y en panderetas de Navidad. También se escenificó en becerradas populares en plazas de toros. Tan popular llegó a ser esta obra que, en 1923, el diario ABC publicó que ¡Se aguó la fiesta! era más famoso que Las Meninas de Velázquez o El entierro del señor de Orgaz del Greco.

        Desde 1956 pudieron contemplarse los carteles del toro de las bodegas Osborne por las carreteras de España, hasta que una ley que regulaba la publicidad en carreteras frenó su expansión.

 

Cartel publicitario del brandy Osborne
 

         Manuel Prieto hizo posible lo que ni Alfonso Romero ni Enrique Guijo lograron: sacar el toro del cuadro ¡Se aguó la fiesta! y situarlo sobre la cima de una loma. Así, gracias a artistas como Enrique Mélida, Alfonso Romero, Enrique Guijo, Rafael Raga y Manuel Prieto el toro bravo mira desde su atalaya recordándonos el lema de Takeda Shingen, aquel samurai japonés de la película de Kurosawa, cuya silueta en la cima de la montaña hacía temblar a sus enemigos: "Firme como una montaña, amenazante como el fuego, fuerte como un tronco, ligero como el viento. En el cielo y en la tierra, tú mereces toda la veneración."






 

 

 

 

 

viernes, 15 de febrero de 2013

EL TORO EN LA PUBLICIDAD DE BEBIDAS


 

 

 

 

La imagen del toro ha sido utilizada en todo tipo de bebidas. He recopilado algunos anuncios publicitarios y etiquetas de bebidas en los que el toro bravo ocupa un papel destacado. No incluyo aquéllas con imágenes taurinas creadas exclusivamente para su venta en establecimientos de recuerdos turísticos.

 

El primer anuncio que quiero destacar por su antigüedad es el de Amontillado Dávila de las bodegas Orbaneja de Jerez. Es obra de Alfonso Romero Mesa y Enrique Guijo, y fue realizado en la segunda década del siglo XX para ser expuesto en la taberna Los Gabrieles de Madrid.  Se trata de un panel cerámico que recoge la escena del cuadro ¡Se aguó la fiesta! de Enrique Mélida, aunque modificado, pues añadieron unas cajas con botellas del vino de Jerez.

 
 
 
 
 Amontillado Dávila. Bodegas Orbaneja. Jerez. Taberna Los Gabrieles
 




 

El toro de Domecq


Otra bodega que utilizó imágenes taurinas en sus productos fue  bodegas Domecq. En los años treinta del S. XX encargaron un cartel al diseñador gráfico Carlos Ruano Llopis destinado a sus campañas publicitarias del brandy Fundador. El cartel representaba una escena en la que un toro bravo perseguía a un maletilla que intentaba torearlo.

 

 

 







Carteles publicitarios del brandy Fundador de las bodegas Domecq

 

 

 

 

El toro de Osborne

A principios de los años cincuenta, y siguiendo el ejemplo de Domecq, las bodegas Osborne también adoptaron la imagen del toro para la publicidad de sus productos Veterano, Conquillero y Fino Quinta.

En los anuncios de ambas bodegas el toro estaba en movimiento.

 
 
 Brandy Veterano de las bodegas Osborne

  

En 1956 Osborne introdujo un cambio en la imagen del toro: escogió un toro en reposo. Con el toro estático realizó una campaña publicitaria del brandy Veterano en las carreteras de toda España.

 
 

 
Brandy Veterano de Osborne

 

 

 

 

Otros productos

 

 

 

 
Anís dulce Miura. Cazalla

 

 

 Dry-Gin El Toro. Destilerías  Mollfulleda

 

 

 

Gin Beltrán. Mahón

 

 
Manzanilla Villamarta

 

 
 

 
 
Bodegas Barbadillo. Sanlúcar de Barrameda (Cádiz)




 
 
Manzanilla la Oreja de Oro. Barbadillo. Sanlúcar de Barrameda (Cádiz)

 

 

 
Whisky Black Bull

 

 
Tequila El Toro

 
 


Tequila Toro de lidia




 
Tequila Aha Toro

 
Toro fruta

 

 

 

Agua tónica Paso de los Toros

 

 

Red Bull

 

 


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

DOSSIER DE PRENSA DE ¡SE AGUÓ LA FIESTA!



 

 

Recopilación de artículos sobre el cuadro ¡Se aguó la fiesta! aparecidos en la prensa escrita e Internet.

 
 
 
 
 
 
 







La Ilustración Española y Americana. Madrid. 15 de junio 1876.

 

 
“Es original del joven artista D. Enrique Mélida; titúlase ¡Se aguó la fiesta!, y el asunto es la aparición de un toro en las inmediaciones del sitio donde algunas gentes alegres celebran al aire libre una merienda: un soldado aparece de pie, y mira receloso al bicho; las damas se asustan, y una cae desmayada en brazos de su vecina; dos majos participan del miedo de sus compañeros, y otro, que no se ha apercibido todavía de la causa que motiva el asombro general, acaricia el pitorro de una bota de vino.

El cuadro tiene vida, pero cualquiera puede creer que la aparición de un comensal tan inesperado, y en actitud nada pacífica, debía ocasionar más movimiento en el alegre grupo sorprendido.

Este cuadro del Sr. Mélida, cuyo dibujo es bueno y brillante el colorido, ha sido agraciado con un segundo premio y adquirido por el Ministerio de Fomento.”
 














Escenas contemporáneas. Madrid. 1883.

 


 

  
“¡Se aguó la fiesta!, expuesto en el certamen de 1876 y premiado con medalla de segunda clase, fue adquirido por el Gobierno, y figura en nuestro Museo Nacional. Fue también enviado a Viena, y se ha hecho popular por sus reproducciones, en fotografías, abanicos, jarrones y objetos de arte.”

 

  

 









La Amenidad. Madrid. 9 de febrero 1884.

 


 
 
 
 
 
 
 
 
 
 



 
La Ilustración Española y Americana. Madrid. 15 de mayo 1892.

  

 
 

“Pero la obra más notable de aquellos años, la que más popular hizo el nombre de su autor, fue la que bajo el chispeante título de ¡Se aguó la fiesta! presentó en la Exposición general de 1876; asunto de inspiración felicísima divulgado mediante su reproducción por todo género de procedimientos entre propios y extraños. Este cuadro, que fue premiado con una segunda medalla y adquirido por el Gobierno, figura hoy en nuestro Museo, y ha sido copiado innumerables veces al óleo y a la acuarela en cuadros, abanicos, platos y hasta en las panderetas de Nochebuena.”
Aureliano de Beruete

 

 











La Velada. Barcelona. 29 de abril 1893.

 

 

 

“Por entonces pintó La antesala del príncipe de la Paz, que le fue premiada en Viena en 1873, La lección de toreo y otros de asuntos tan intencionados como característicos de la época llamada de Goya. La más notable de sus obras de este género fue el cuadro titulado ¡Se aguó la fiesta!, que representa unas alegres parejas cuya merienda viene a sorprender la presencia de un toro.”





 

 
 
 
 
 
 

La Correspondencia de España. Madrid. 5 de agosto 1901

 

 

  
LA BECERRADA DE LOS ZAPATEROS

“Siempre ha sido tradicional la anual becerrada de los zapateros, o si les parece mejor a ustedes, de la sociedad de Industriales del Calzado y similares...

El programa de la fiesta es variado y kilométrico, lo que hace esperar que abandonaremos la plaza de noche...

Colocados en el centro de la plaza los encargados de reproducir el cuadro de Mélida ¡Se aguó la fiesta! dióse suelta a un becerrete muy bonito con bastante cuerna y bravuconcillo. Un pobre viejo que formaba parte de la troupe de ¡Se aguó la fiesta! echó a correr hacia la barrera, perseguido por el becerrete, que le alcanzó al ir a saltar por la puerta del 8, derribándole e hiriéndolo al parecer.

Se llevaron al becerrete. El pobre viejo quedó inmóvil en el suelo de donde fue recogido y conducido a la enfermería por los asistentes.”













 

Blanco y Negro. Madrid. 12 de enero de 1913

 

 
 
 
 
 
 
 
 Reproducción a color del cuadro ¡Se aguó la fiesta! en la revista “Blanco y Negro” de 12 de enero de 1913














 

Postal del cuadro de E. Mélida "Se aguó la fiesta". Hauser y Menet 1ª serie nº 6

 
 
 















ABC. Madrid. 4 de febrero 1923.

 

 


 

“Maestro en este arbitrio fue Enrique Mélida. Uno solo de sus cuadros, ¡Se aguó la fiesta! ha sido en España, y lo es aún, más popular que Las Meninas y mucho más que El entierro del señor de Orgaz, y, por lo menos, tanto como la más popular obra mística de Murillo. ¡Se aguó la fiesta! es aquel cuadro en que un bravo toro, retinto en negro y corniapretado, se planta amenazador ante un grupo de chisperos que comen regocijados en pleno campo.”
Martín Ávila








  




 
Revista de la Biblioteca Archivo y Museo.  Ayuntamiento de Madrid. Enero 1927
 


 


“Mélida, madrileño, nacido el 6 de abril de 1838, casa con María Bonnat, hermana del retratista francés León, y muere en París el 28 de abril de 1892. Trasladado a Bayona es enterrado en el cementerio de San Esteban en el panteón de la familia de su mujer. Es el autor de "Despacho parroquial", "El esquilador", "La lección de toreo", "La antesala del príncipe de la Paz", "La misa de parida", "Ronda de la Inquisición", "Pórtico de San José en Madrid", "Pobres esperando la hora de la limosna", y su obra más conocida es ¡Se aguó la fiesta!, la merienda campestre interrumpida por la presencia de un toro, cuadro reproducido infinitamente desde las planas de La Lidia hasta los abanicos pericones de las damas de aquel tiempo.”

 

  

 

 
 
 
 
 
 
 
ABC. Madrid. 10 de noviembre 1964

 


 
“La niña perdida” es, pues, uno de los cuadros más significativos de Enrique Mélida, cuya modernidad (reflejos de la lluvia, alguna cabeza) lo sitúa lejos de "La comunión de las monjas", del Museo Provincial de Málaga, que es otra de sus obras más características, sobre todo después de haberse perdido el famosísimo cuadro titulado “¡Se aguó la fiesta!”.
Antonio Manuel Campoy












 

Página WEB del Museo Carmen Thyssen de Málaga

 
“Junto a las escenas puramente taurinas que durante el siglo XIX conocieron en España su mayor proliferación artística, aparecieron pronto cuadros cuya iconografía refleja por separado episodios de la vida de los toreros y situaciones protagonizadas por toros bravos fuera de su contexto, con un marcado carácter anecdótico en ambos casos. De esa segunda vertiente iconográfica quizá el más afortunado fue el titulado ¡Se aguó la fiesta! de Enrique Mélida, obra desaparecida de la colección del Prado que recibió una segunda medalla en la Exposición Nacional de 1876, y cuyo verdadero éxito popular lo atestiguan la multitud de copias y versiones que aparecen de ella con cierta frecuencia en el mercado de arte español.”
Carlos G. Navarro
Especialista en pintura del siglo XIX en el Museo Nacional del Prado










 
 
 
 
Madrid histórico. Enero/febrero 2013

 

 
 
“Entre sus pinturas costumbristas una de las más conocidas es ¡Se aguó la fiesta!, obra que ha sido copiada innumerables veces al óleo y acuarela, que obtuvo en 1876 la medalla de segunda clase en la Exposición Nacional de Bellas Artes y fue adquirida por el Estado español. Esta obra está desde hace tiempo en paradero desconocido, pero sí existe actualmente una copia de esta pintura firmada por Enrique Mélida en 1876, propiedad de Arturo Mélida Vilches, descendiente del pintor (ver nota más abajo).

En la madrileña taberna Los Gabrieles, cerca de la plaza de Santa Ana, podemos ver una copia de ¡Se aguó la fiesta! en azulejos, de gran belleza. Mirando este cuadro de Mélida, nos viene a la cabeza la imagen publicitaria del toro de Osborne, lo que hace pensar que, la silueta recortada en el horizonte de éste, podría haberse inspirado en el cuadro de Mélida.”
Victoria Mélida Ardura

Nota: En marzo de 2005 se subastó en la Sala Durán de Madrid otra versión del cuadro ¡Se aguó la fiesta! pintada en 1876 por Enrique Mélida. Esta obra salió bajo el  nombre de Un invitado inesperado.